Características y cuidados básicos del Espatifilo o cuna de Moisés

El espatifilo es el nombre dado a esta hermosa flor perteneciente a la  familia Araceae. Un nombre por el que además se le conoce es el de cuna de Moises, ya que sus flores tienen unas formas muy características que parecen precisamente una cuna.

Si quieres comenzar a tener una de estas plantas en casa, ahora conocerás algunas de sus características básicas que debes tener en cuenta. Y de igual forma algunos de los cuidados básicos que deberás tener.

Características físicas del espatifilo

Características del Espatifilo

Esta flor también es conocida como lirio de la paz, bandera blanca o vela de viento, es una planta que puede ser encontrada sobre todo en américa Central y América del sur. A la fecha se conocen al menos 36 especies derivadas.

De nombre científico Spathiphyllum wallisii, es una perennes herbáceas que posee unas hojas de un tamaño aproximado de entre 13 a 65 centímetros de largo y unos 4 centímetros de ancho. Su longitud es la que suele variar mucho.

Hay un dato curioso: ahora mismo hemos usado el término flor para definir lo que parece ser una. Pero si queremos ser precisos, eso en realidad es una hoja que posee una forma muy particular.

La hoja es blanca, la cual termina por envolver a las semillas para protegerlas del ambiente. En términos estéticos pareciera ser una flor, pero al final por sus características es una hoja que lo envuelve.

Leer Más:  Biznaga de chilitos o Mammillaria magnimamma: características, usos y propiedades

Cuidados de la cuna de Moisés.

Si deseas tener una en casa, la buena noticia es que esta planta no requiere mayores cuidados. Es bastante resistente y va a necesitar pocas intervenciones de tu parte para que pueda seguir desarrollándose.

Temperatura.

Lo ideal para tenerla es con una temperatura que varíe entre 20 a 23 grados centígrados, pudiendo ser aguantable hasta los 25. Puede soportar más, pero eso evitará que crezca con toda su belleza.

Intenta no tenerlo con la luz solar directa, terminará por tener un mejor aspecto si la colocas en lugares con una sombra parcial. No es necesario tenerla guardada, con evitar el sol de frente será todo.

Riego.

Es necesario que se mantenga húmedo el suelo donde se encuentra, en gran parte por ese motivo no es buena idea que se encuentre frente al sol. Ya que se requiere que su suelo se encuentre relativamente mojado siempre.

Siempre es buena idea poner el dedo dentro de la tierra para probar si tiene humedad suficiente. Con pulverizar un poco de agua de cuando en cuando permitirá mantenerlo con el agua que necesita para vivir.

Abono.

Para mantenerlo bien nutrido, es buena idea agregarle algo de abono. Va a ser un trabajo de una vez al mes aproximadamente, porque con agregárle un poco cada 20 días tendrá suficiente para estar creciendo de forma correcta.

Plagas que pueden afectarlo.

Las plagas de las que más debes proteger tu planta son los ácaros, la mosca blanca y el pulgón. Será necesario estar revisando de forma manual las hojas para verificar que no haya presencia de ellos.

Leer Más:  ¿Qué es una mandrágora y para qué sirve? ¿Son ciertas las leyendas?

¿Qué pasa si no florece?

Si notas que no da esas hermosas “flores” que posee, es necesario estar experimentando con algunos de los cuidados básicos.

Revisa que no tenga una falta de nutrientes, que no tenga un exceso de luz o no esté húmeda su tierra. Prueba que no estés poniendo abono en exceso, que eso también podría terminar por quemar las hojas.

Como se dijo al principio, no es una planta demasiado complicada. Si notas que no queda como quieres, simplemente haz algunos cambios y ten paciencia. Notarás que pronto estará tan bella como la quieres tener, con esa blancura que la caracteriza.

Deja un comentario