Las verduras son parte esencial de la dieta diaria de los seres vivos. Los consumimos por toda la cantidad de vitaminas, minerales y otros elementos que posee. La variedad es enorme y pueden ser preparados de muchas formas.
Pero por lo regular pensamos en verduras frescas, muy vivas. Pero, ¿tiene algún beneficio consumir verduras deshidratadas? En donde se le haya retirado el agua, ¿poseen algún tipo de ventaja?
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¿Por qué deshidratamos una verdura?
La primera pregunta a contestar es, ¿por qué le quitaríamos el agua? Ya que estando fresca podemos aprovechar todo su potencial. Y al retirarle todo el vital líquido estaría perdiendo muchas de sus propiedades.
La razón más común para ello es por conservación. Ya que al realizar este proceso se hace mucho más difícil la aparición de moho, bacterias y distintos tipos de reacciones que podrían aparecer si no se realiza esto.
De esta forma podemos alargar su vida útil, sin tener que perder todos los nutrientes. Porque al contrario de lo que se puede pensar, todavía son bastante nutritivas estando en este estado. Hay que saber balancear.
Los momentos más comunes para realizar este proceso es:
- Cuando llega el verano, en donde las altas temperaturas pueden afectar los vegetales que guardemos. Por lo que en estas condiciones permitirá pasar por ese momento en donde pueda afectarse nuestras conservas.
- Para poder consumir esas verduras fuera de temporada. Al deshidratarlas podemos almacenarlas por más tiempo. Y de esta manera, podremos llegar a consumirlas aunque nos encontremos en una temporada que no se de.
Ventajas y desventajas.
Ahora bien, aquí vas a encontrar cuales son los pros y contras de realizar esto.
Las ventajas de deshidratar.
- El tiempo de almacenaje puede ser bastante largo. Dependiendo del procedimiento que le hagas, este puede llegar a ser incluso de varios años. E incluso pierden volumen, por lo que tampoco terminarán por ser estorbosas.
- Puedes de esta manera ahorrar dinero, porque si quieres comprarlas fuera de temporada por lo regular serán más caros. En cambio, puedes comprarlas a buen precio en su tiempo y así ahorrar algo de dinero.
- Para cierto tipo de alimentos son incluso ideales. Para muchos tipos de sopas son la mejor forma de prepararlo, ya que puede usarse para darle mejor sabor. O incluso una mejor textura, al estar secos permite morderlos.
- Siguen conservando muchas propiedades. Por ejemplo, si los quieres como antioxidantes por lo regular esto seguirá en su versión deshidratada. Al mismo tiempo que ayudará a mantener peso, porque son muy saciantes.
¿Y qué desventajas posee?
- Algo que pocos saben es que el contenido calórico sube al prepararlos de esta forma. Por lo tanto, es un punto a tomar en cuenta si estás haciendo algún tipo de control de tu dieta, ya que no será la misma que al estar fresca.
- Si va a perder nutrientes. Va a terminar menos vitaminas, minerales, niacina y otros componentes. La buena noticia en todo esto es que no es una pérdida masiva, por lo que siguen siendo extremadamente nutritivas.
- El sabor cambiará, incluso en algunos casos solo ligeramente. Pero si te gusta un sabor en particular, deberás probar su versión deshidratada también. Para conocer si será del agrado de tu paladar.
Como verás, son una excelente opción. Si pones en balance en general tiene más ventajas y desventajas, siendo estas últimas mínimas o incluso no tomarse en cuenta dependiendo de cada persona.
Pero en conclusión, son una excelente opción para poder seguir consumiendo verduras, transportarlas o almacenarlas. Ya que nuestro cuerpo requiere de todas sus propiedades, al mismo tiempo que nuestro paladar será agradecido de darle toda esa variedad.